29/4/13

Salida con mi Amo (3ª y ultima parte)





-Mi Señor, puedo correrme no aguanto más- el responde sin miramientos, yo no mando ahora, pregúntale a quien te esta partiendo el culo, si él te deja, puedes hacerlo.

-Señor, le suplico me deje correrme, siento su miembro en mi culo y no puedo reprimir tanto placer-
 
Suelta una carcajada y me dice:

-Ya te dije que disfrutarías como lo que eres, puedes correrte cuando yo lo haga y te garantizo que lo sabrás-

Dice que lo sabré, pero no lo conozco, lleva condón, es complicado saber cuándo se corren con el puesto sino gesticula palabra alguna. El movimiento sigue y no puedo ni pensar, solo deseo correrme, no sé si podre aguantar mucho más….

Deben pasar segundos, mi cabeza ya no es consciente, solo siente, placer excesivo, ganas de explotar en un orgasmo tan brutal como las embestidas que me propina ese desconocido que al parecer pago un precio por hacerme suya, me sorprende ya que mi Señor nunca hizo algo así. Me imagino la imagen, tan humillante, expuesta, follada por extraños, me repugna pero a la vez me excita mucho, tanto que debo concentrarme en no correrme como me ordeno esa voz áspera.

De golpe el bamboleo para por completo, la sigo notando dentro de mí pero quieta, inmóvil, muy adentro. Mi cabeza no para de pensar, no ahora no puede parar, que pasa, que quiere, mi orgasmo, se ha corrido y no me entere, enfrascada en mis pensamientos?....

Miro la cara de mi Señor que esta todo el rato observando y veo que mirando detrás mío accede con la cabeza, no sé qué pasa, no entiendo nada, su miembro erecto sale automáticamente de mi culo, con las dos manos lo abre bien y la voz vuelve a sonar en el silencio de la noche

-Vaya que dilatado se ha quedado este culo, me encanta, ahora date la vuelta, agáchate y no dejes de mirarme a los ojos –

 la voz grave ha quebrado mi mente, hago lo que me ordena, me doy la vuelta lo miro a sus ojos, grises, profundos, sin dejar de hacerlo me agacho, su miembro apunta a mi cara, me agarra del pelo para asegurarse que no dejo de mirarlo y mientras lo hago, oigo el ruido de quitarse el preservativo, me estira muy fuerte, hacia arriba, casi ni parpadeo inmóvil, noto un ligero movimiento abajo, en unos segundos noto como es su mano que se pasea a un ritmo frenético apuntando a mis pechos, me dice con voz entrecortada, córrete ahora si puedes zorra! Pongo mi mano en mi coño mojado y empiezo a masturbarme, estoy tan excitada que en cuanto noto la leche caliente en mis tetas me corro sin tocarme apenas, su leche resbala por ellas, cuando acaba, me deja el pelo soltando mi cabeza, casi sin respiración todavía, me dice en tono jocoso, ves como te dije que sabrías cuando te tenias que correr y sin articular palabra se fue hacia mi Amo y le comento alguna cosa que no escuche.

El vino hacia mí, me dijo que estaba muy guapa así toda manchada de leche, que quizás al ultimo mirón le gustaría rematar la faena, era un chico alto, delgado, poco hablador, asintió con la cabeza, llevaba rato mirando, se acerco a mi apuntando a mi cara a lo que mi Señor le comento

-La cara es mía, córrete en la zona del cuerpo que quieras, esta a tu disposición, pero en esa cara solo me corro yo-

-La espalda – dijo con voz baja


Me di la vuelta pensando en los gustos raros de ese chico, nadie se ha corrido en mi espalda, me puse sentada en mis propias piernas sin ver qué pasaba, mi Señor se coloco delante de mí, me ordeno abrir la boca y me volvió a meter su polla, seguí chupándole con placer, sin pensar en mi espalda, saboreando cada engullida, lentamente, coloque una mano en sus huevos acariciándolos mientras iba profundizando en mi garganta, los chupe, babee, mordisquee, para luego dedicarme por completo a su polla, succionándola, acariciándola con mi lengua, notando como crecía y endurecía en mi boca, notaba como me iba mojando, me estrujaba los pezones, soltaba pequeños quejidos por lo que él, apretaba mas, notaba como le quedaba poco para correrse cuando de repente note un chorro caliente desde mi nuca hacia abajo, inundo mi espalda toda salpicada, oía como resoplaba el chico y las gotas no dejaban de caer hacia el final de mi espalda, me excitaba, no dejaba de chupar, quería mi premio, me había portado muy bien, merecía un premio o eso creía….

Cuando pensé que me daría su leche, la saco, y se corrió en mi cara, abrí la boca y saque la lengua, me empapo toda la cara, me tiro un paquete de pañuelos de papel y me dijo:

-¡Quiero verte correr así, mastúrbate para mi zorra!

Así lo hice, con el paquete sin abrir en mi mano, no tarde apenas nada, notar caer por mi espalda y mis pechos todo aquel esperma desconocido y mezclarse con el que goteaba desde mi cara me puso muy cachonda provocando otro orgasmo brutal.

Al acabar, mi Señor, se acerco al maletero, saco una toalla y me la dio para que pudiera limpiarme, ya no quedaba nadie allí, estábamos solos, cuando acabe de vestirme, me acerco fuertemente con sus brazos me dio un beso en la frente y me dijo

Te has portado muy bien, otro día subiremos el listón, vámonos a casa mi perrita, estarás cansada, una ducha y a la cama, ha sido una noche muy larga.

 
 



2 comentarios:

  1. Interesante...no he tenido la oportunidad de participar en este tipo de juegos sexuales pero entiendo que pueden resultar tremendamente morbosos. Ultimamente parece que la sumisión está de moda y es extraño pues no paran de tratar de educarnos en la supuesta "igualdad". Con tu permiso voy a seguir por aquí a ver que mas relatos tienes...ah soy richie en pajis y richiem en amater... besines paisana.

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  2. Hola Richie!
    No es que se han puesto de moda, sino que el libro de las 50 Sombras ha sacado a la luz este tipo de practicas, es cierto que se pide la igualdad pero esto es un juego sexual, si lees mas abajo tambien hay sumision en hombres que es muy habitual, mas que en mujeres diria yo.
    Gracias por leerlo y darme tu opinion :))
    Besitos!!

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