15/5/13

Una noche cualquiera 2 parte



Hago lo que me dice y vuelvo a subir, cada vez mas intrigada y nerviosa, entro en casa me quito el abrigo y saco todo lo de la bolsa en la cama, hay un vestido muy provocativo y cortísimo, mis pechos no caben y si me muevo se me ve todo de lo corto que es, unas medias de rejilla y también veo que hay un huevo vibrador.

Tal y como ha dicho el me lo pongo todo, por último el huevo a lo que me doy cuenta de que no hay ni tanga ni bragas, tendré que meterlo bien al fondo para que no se vaya a mover y caerse. Me pongo el vestido y salgo otra vez como si no pasara nada,estando en el ascensor me doy un susto de muerte cuando en mi coño húmedo siento como el huevo toma vida propia, dios es increíble, espero que no estén esperando los vecinos, hay que mantener las formas aunque es difícil si el huevo del infierno no para, me pregunto como sabrá que ya estaba en el ascensor para activarlo…..por fin para y llego a la planta baja, por suerte no hay nadie y salgo sonrojada por el calor provocado en mi entrepierna, sigo andando y cruzo la puerta cuando de nuevo empieza a vibrar, me paro, no puedo andar con eso funcionando, intento disimular mi cara de placer mientras veo como juega con el mando desde la ventana del coche, me sonríe y para.

Por fin puedo llegar al coche, le digo riendo, esto de que te pille por sorpresa esa vibración tan excitante, es algo que te deja fuera de juego, nos reimos y emprendemos la marcha.


-Gracias por la ropa – le comento

-No hay de que, para esta ocasión has de estar fantástica y accesible a mis deseos-

-Siempre lo estoy- sonrío pícaramente a lo que él me mira con vicio en sus ojos.

-Me dirás que haremos esta noche- le comento

-No.- Me contesta secamente


Seguimos el trayecto mientras tengo que debatir con el huevo que llevo ya que sin darme cuenta va dándole al mando hasta que ve que me retuerzo y puedo correrme, que es cuando lo para, estoy volviéndome loca, necesito sexo urgentemente, estoy muy excitada.
Tranquila ya llegamos, te aviso a dos manzanas, me contesta para tranquilizarme mientras me roza mi muslo casi al aire ya que al sentarme voy enseñando mi sexo con ese vestido ridículamente pequeño, sube lentamente hasta que pasa suavemente dos dedos por encima de mi sexo rasurado.


-Vaya si que estas cachonda!! Me encanta tenerte así hoy, todo será más divertido- suelta una pequeña risa de que trama algo grande, pero está claro que no me lo dirá.


Hemos llegado a la primera parada y el coche se detiene.


Miro por la ventanilla veo una calle sin ninguna peculiaridad que me llame la atención.

– ¿Es aquí le pregunto curiosa?-

-No, pero te dije que te avisaría dos calles antes. Ten esta otra bolsa y póntelo-


Miro en la diminuta bolsa y hay un antifaz negro, no tiene aberturas para los ojos por lo que no veré nada con el puesto.

Lo miro y asiente, de nuevo la bola empieza su baile y me derrito mientras me lo pongo.


-Ya esta no veo nada, ¿ahora que hacemos?- le pregunto con gran curiosidad

-Ahora te pondré varias cosas yo mismo y no quiero que digas nada más, simplemente obedece y no te quites el antifaz para nada hasta que yo te lo ordene, ¿me has entendido?-

-Sí, no diré nada más hasta que me digas-

Oigo sonido de una bolsa y unas cadenas, me dice que me dé la vuelta como si mirara por la ventanilla y me recoja el pelo, siento el frio metal recorriendo mi cuello, me está poniendo un collar. Me ordena que vuelva a girarme y oigo el ruido de más cadena y un clic en el cuello, ahora noto la cadena que cuelga y pesa en mi cuello.


-Estas preciosa así, me encanta, veras como disfrutan hoy contigo-

2 comentarios:

  1. Me mola mucho, buena narrativa, me encantaria ser el prota y desde luego para dominarte a ti hay que tener muchas pelotas. Yogui

    ResponderEliminar
  2. jajajjajajaj Gracias Yogui, me alegro que te guste y muy aplicado jijijiji espero que la tercera te guste tambien.

    Besos

    ResponderEliminar